jueves, fontenay.aux.roses (12:06)

Extractos del blog de Azorín (intitulado El Escritor): «El estilo es una cosa y el tono es otra. El estilo puede ser correcto y el tono inadecuado. ¿De qué modo se consigue el tono en el libro? Nadie podrá decirlo. / Goethe es quien señala como distintivo inconfundible del artista esa cualidad: la inquietud […] El estilo es la fuerza vital. Hay escritores que creen que tienen estilo y no tienen fuerza vital. No son, por lo tanto, escritores. Nos dan una vida ficticia. Nada que no sea vivo puede perdurar. […] Del libro de Dávila, descartada la virulencia, quedaba lo que debía quedar: una afirmación de vida, un alarde de fuerza […] Hay dos clases de nombradías: las hay horizontales y las hay verticales. Las hay en extensión y las hay en profundidad. ¿Cuál será la de Dávila? Los que gozan nombradía en extensión ven su nombre y sus obras aplaudidos por todos […] Los que gozan de la nombradía en profundidad apenas y la gozan. El área de su prestigio es muy corta. Han de sobreponerse a sí mismos, a sus desalientos, a sus caídas, para proseguir en su obra. El público los ignora. Aun la crítica independiente los discute. En cambio, si no gozan de un extenso público ahora, su obra irá perforando el tiempo profundamente y pasará cada vez más estimada, de generación en generación. ¿Cuál será el prestigio de Dávila y el destino de su obra?»

Nombradía: un plato de lentejas. Tras publicar su primera novela, Hiponarciso adquirió alas editoriales y voló el icariano vuelo del ego: quince minutos: Ícaro.Warhol: vuelo que no da nada: peor es la caída: el regreso a la realidad: me tomó un mes dejar de buscarme en google, dejar de yuxtaponer Musofobia y Harmodio para embarrar un par de pupilas enfermas en lo que se dice de mí: cortesano perfecto para tan poca nombradía disponible. ¿Quiénes son mis Dávilas? Jaime Mesa (Rabia), Vicente Alfonso (Partitura para mujer muerta), autores de novelas que salieron al mismo tiempo que la mía: novelas que comparten la pista de galgos con Musofobia: estúpida carrera en pos de ese pan bendito de los escritores: la nombradía: ¿quién pasará primero la aduana de Rafael Lemus, por qué Rabia lleva tres semanas entre las más vendidas y no Musofobia, por qué Vicente Alfonso tiene más hits en google que Jorge Harmodio? / Así se te van las horas, desperdiciándote con el ratón en la mano y los ojos colgados de esos guarismos del google de los que pende y depende tu existencia: google es tu fetiche medidor de nombradía. / Y afuera la realidad: el trabajo: un sistema de resumen automático que avanza a trompicones, una campaña de evaluación donde tu sistema de resumen correrá otra carrera de galgos (ésta científica: aunque la monombradía se vista de ciencia, monombradía se queda), ésta en pos de otras estadísticas, de otros podios todavía más lejanos: aquí el premio es el pan de cada día. / No escribes, apenas trabajas: finges. El contrato se acaba en noviembre y el desempleo te tiene muerto de miedo. La publicación se acabó en mayo y retomar la pluma te tiene muerto de miedo. El posible regreso a México te tiene muerto de miedo. Y a tu lado sientes la estela de los galgos que te rebasan: el premio es un plato de lentejas.

8 opiniones en “jueves, fontenay.aux.roses (12:06)”

  1. Nombradía horizontal es lo que buscas con tu sistema de resumen automático; es lo que se acaba traduciendo en un plato de lentejas. Ecuación sencilla. No busques el reconocimiento de quien te paga, sino el de quien comerá del fruto de tu trabajo. Cuando llegue éste, llegará aquél. Opera. Coopera. Comparte.
    Nombradía horizontal es lo que crees que quieres para Musofobia, pero, en el fondo, nombradía vertical es lo que deseas. Por favor, que nadie convierta Musofobia en un plato de lentejas.
    Dices que sientes la estela de los galgos que te rebasan. Pero no tienes prisa por llegar al premio. Párate y mira a las gradas del canódromo. Puede que, entre el público, haya unos cuantos que se olviden de la competición y te miren con curiosidad. Puede que, al fijarse en éstos, otros tantos se olviden de la carrera y también te miren. Siempre hay quien prefiere hacerse preguntas difíciles (¿por qué no corre ese galgo?) que fáciles (¿quién ganó la carrera?).

  2. Les invito a que entren a la dirección que les pongo abajo, para que vean la triste realidad de lo que consumen la mayoría de los mexicanos en libros.

    Reflexionemos, el escribir, publicar y vender literatura de calidad es casi un sueño.

  3. Querido Harmodio,

    Todos estamos tan enfermos de lo mismo. Es un lujo compartir estanterías con tu novela. Es decir, es un lujo que nuestras novelas, ellas, solas, sin nosotros, compartan estanterías. Ya no nos pertencen. Y lo que pase con ellas ya no es nuestra preocupación. El verdadero problema es la siguiente, la importante. Espero impaciente el siguiente manuscrito tuyo. Sólo eso importa.
    Un abrazo

  4. Hey, lo de muerta de miedo déjamelo a mí que reviso Musofobia y casi tengo que desenchufar la compu.
    Tu galgo es galgo fino y tus lentejas duraderas, ya verás.

  5. Llegué aquí exactamente así: en la búsqueda de la nombradía miniatura, en una escala menor, de pacotilla. Desconozco las razones por las cuales tengas un link a mi blog en el tuyo, pero me ha puesto feliz. Te lo agradezco, entonces. Ya estuve leyendo algunas de las entradas anteriores y me han gustado. Volveré por acá en adelante, a ver qué más encuentro.

  6. Entre tantos ánimos casi da vergüenza sumarse al otro lado, al de «muertos de miedo». Si de un mínimo consuelo sirve, te adelantaremos en la vuelta por sólo unos meses, y cuando nos alcances, te invitaremos unas chelas para decirte que todo va bien, que volver a casa es de tantas formas bueno, que en México la vida es siempre más sabrosa y colorida e intensa, que disfrutes del regreso. Eso, claro, si el condicional se cumple. Si no, te seguiremos leyendo, desde aquí, la semilla, que tiembla feliz mientras se transforma, que duerme, de vez en cuando, su necesario sueño de silencio.lf.

  7. Curioso hablar de las nombradías, curioso término también, pero al final de cuentas, interesante. Quien no se haya gogleado en la vida que tire la primera piedra,saludos, Harmodio, desde acá.

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